Consideraciones.org

 
Para ponernos a pensar...
 

Saben, pero no por qué...‏


Únicamente los cristianos valoran las cosas en su justa apreciación

y no tienen los mismo motivos para alegrarse o entristecerse de ellos que el resto de los humanos.



A la vista de un atleta herido, llevando en su cabeza la corona de vencedor,

aquel que nunca ha practicado deporte considerará únicamente el hecho las heridas y el sufrimiento.

No se imagina la felicidad que proporciona la corona.


Así reacciona la gente.

Saben que nosotros padecemos pruebas, pero ignoran por qué las padecemos.

No miran más que nuestros sufrimientos. Ven las luchas en las que estamos comprometidos y los peligros que nos acechan.

Pero las recompensas y las coronas les quedan ocultas, al igual que la razón de nuestros combates.

Como lo afirma San Pablo: “...nos consideran pobres, pero enriquecemos a muchos, no tenemos nada, pero lo poseemos todo.”


San Juan Crisóstomo