Nunc.
Di
despacio, con ánimo sincero: nunc coepi! —¡ahora comienzo!
No te
desanimes si, desgraciadamente, no ves en ti la mudanza, efecto de la
diestra del Señor...:
desde la bajeza tuya, puedes gritar:
¡ayúdame, Jesús mío, porque quiero cumplir tu Voluntad..., tu
amabilísima Voluntad!
San Josemaría Escrivá de Balaguer