|
¿Hecha para ser guardada?
Nuestra vida no está hecha para ser guardada,
sino para ser entregada.
Amar no es "sentir
emoción", no es desear poseer al otro,
es olvidarse de sí mismo
para darse al otro.
Cada vez que uno "toma"
para sí, deja de amar.
No digas que amas cuando
quieres solamente disfrutar del otro:
¿no sería esto entonces
un amarte solamente a ti mismo?
Amas de veras si eres
capaz de renunciarte, de olvidarte,
si eres capaz de morir a
ti mismo en beneficio de aquel a quien amas.
El que más ha amado, es
Jesucristo.
La "cruz" de Jesús no es solamente un instrumento
de suplicio, de renuncia...
es el signo mismo del
más grande amor que haya abrasado un corazón.
"No te he amado en
broma..."
Padre Lluciá Pou Sabaté
|
|