Consideraciones.org

 
Para ponernos a pensar...
 
¿Ella…

Todos sus pensamientos, sus deseos, sus afectos, fueron totalmente para Dios;
No hubo ni una palabra, ni un movimiento, ni una mirada de sus ojos,
ni un suspiro suyo, que no fuera para Dios y para su gloria;
sin apartarse nunca ni separarse por un momento del amor divino.

San Alfonso María de Ligorio.