Consideraciones.org

 
Para ponernos a pensar...
 
Un asombrarse de los cielos...

Oh, cuán grande es la bondad de Dios, más grande de lo que podemos entender. Hay momentos y hay misterios de la misericordia divina sobre los cuales los cielos se asombran. Que cese nuestro juzgar a las almas, porque la misericordia de Dios sobre ellas es extraordinaria.

Santa Faustina Kowalska.