|
Fácilmente reconocible...
Es fácil reconocer si un
siervo de Dios tiene el espíritu de su Divino Maestro cuando Dios lo
emplea para realizar algún buen trabajo. En tal ocasión, no cede a la
autocomplacencia, que es siempre contraria a la verdadera virtud; por
el contrario, está dispuesto a verse a sí mismo humillado, y se
considera, en todo, inferior a los demás.
San Francisco de
Asís.
|
|